Triste viejo Elías, dejó a sus dos lectores colgando del zarzo. Leerlo era la única forma de volver a escucharlo como en tiempos del café en ese sitio con un nombre hiperbólico para lo que en verdad era.Casi, casi lo veía pateando taxis y puteando perras.
Las situaciones, nombres y lugares que se muestran en este sitio, son producto del insomnio. Cualquier parecido con la realidad, espero lo sepan disculpar.
2 comentarios:
Pasaba por aquí, paseando el perro del insomnio, buscando algo que hace meses hace falta...
un abrazo
Triste viejo Elías, dejó a sus dos lectores colgando del zarzo. Leerlo era la única forma de volver a escucharlo como en tiempos del café en ese sitio con un nombre hiperbólico para lo que en verdad era.Casi, casi lo veía pateando taxis y puteando perras.
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